domingo, 16 de diciembre de 2007

...Something...


Y miraba por aquel gran ventanal, aquel reflejo de su vida, ese espejo de sí misma, de lo que sentía, de lo que era.

Aquello de opaco color, y tan brillante, tan paciente, tan igual... y único.

Trazaba rasgos ilegibles, por mero placer, por conocerse, por orgullo. Por necesidad, por sed, por hambre.

Era placer de letras, un vicio. Se conocía cada día más, cada lágrima más. Era orgullosa, por eso guardaba cada escrito en secreto. Era una necesidad inevitable, inoportuna, espontánea. Tenía sed y hambre de gastar tinta, papel, movimientos, pensamientos.

[Without A Name, Un Cuaderno Viejo, Gabriela Aguirre Gay]

domingo, 2 de diciembre de 2007

Silencio Amoroso

¿Sí o no? Silencio.
¿Ésa es tu respuesta?
¿Tu silencio afirma?
¿Sí? Silencio. ¿Niega?
¿No? Silencio. ¿Duda?
¿Qué? Silencio: tiembla:
bulle, cuando callo,
entre cuatro orejas.
Pero... ¡dime algo!:
más silencio. Pesa
como una granada
medio pechiabierta,
medio casi harta
de ser aún materia
del viento, de estar
tiembla que te tiembla
entre fronda y fronda
casi medio muerta
de risa, de oriámbar
la bocaza llena.
Medio casi hablas,
pero callas. Pueblas
tu voz de palabras,
pero cuando apenas
vas a pronunciarlas,
haces penitencia
de silencio, muda,
te arrepientes, piedra.
Pendo del silencio
tuyo, como esa
araña colgante
pende de su tela.
¿Sí o no? Responde.
¿Sí? ¿No? ¿Sí? Contesta.
Temes, ¿qué peligros?
Ninguno te acecha.
Lo que es peligroso
en una pareja
de amor, es callar,
porque sin la lengua,
discurre la carne,
poliglota terca.
Silencio. ¿Sí o no?
¿Sí? ¿Ya?... ¡Qué tristeza!
[Silencio amoroso, Poemas de adolescencia, Antología, Miguel Hernández]